detectives privados MadridSabemos que la situación económica de nuestro país no es la más agradable o la mejor que podíamos imaginar hace pocos años y ello lo que hace es despertar la imaginación de todo aquel pícaro que necesita o quiere dinero “fácil” y sin creer mancharse las manos. Todos conocemos las aseguradoras y todos en cierto modo tenemos un seguro que “cubre” nuestro hogar, negocio, casa, moto coche o lo que sea. Bien, pues hoy día los datos que se reflejan de las denuncias de estafas al seguro, aclaran que en el primer semestre del año 2012 se denunciaron más de 1000 robos con intimidación, lo cual no deja de ser una situación grave y alarmante. Pero es que en casos como los que declaran que el robo fue en el domicilio familiar por la mañana mientras estaban trabajando y sustrajeron 1.200 euros, joyas, documentación, teléfonos móviles y demás enseres de valor, es claro que el parte al seguro hay que darlo si es que se tiene asegurado el hogar, pero lo que pasas es que muchos casos de estos robos son falsos, con la intención de cobrar del seguro una indemnización sin haber sufrido dicho robo claro está.

En este caso en concreto el Juzgado de Vigo hace escasos meses desenmascaró lo que al parecer fue un robo en un vehículo a motor, parecía ser que a un señor le robaron los asiento de su coche de gama media alta, y claro está denunció el hecho, pero tras investigaciones de la policía y del juzgado quedó claro que no fue así. Los asientos se encontraron en Internet en una página de ventas de piezas de coches y lo más curioso es que el teléfono de contacto para la compra era el del señor que había denunciado el robo y dueño de los asientos, la aseguradora de hecho comprobó los datos y así fue, no era un robo era un intento de estafa al seguro.

Estas situaciones e intentos de estafa a las aseguradoras no dejan de crecer hoy día a lo cual las empresas aseguradoras se han blindado por completo para no dejar colar ni un caso que al fin y al cabo pagan el resto de asegurados. Hoy día no existe un perfil claro de los sujetos simuladores de delitos, pero por los casos que se dan podemos hacernos una idea de que pueden ser cualquiera sin sospecha alguna. Otro caso curioso es el de un jefe de electricistas de una obra que comprobó un lunes por la mañana que la puerta estaba abierta y forzada faltando de su interior las herramientas, valoradas en más de 1.000 euros, tras denunciar el robo y reclamar mediante la seguradora de la obra la Policía Nacional recuperó taladros y demás herramientas en un establecimiento de compraventa, y resultó que quien realizó la venta fue el propio jefe de electricistas, con lo cual quedó claro que era un intento de estafa.

Conforme a los datos los casos más comunes son las denuncias de robo con intimidación y violencia, necesarias para que las aseguradoras puedan pagar a sus asegurados en muchas ocasiones; del mismo modo siguen siendo usados los casos de daños en el vehículo para reparar la chapa y pintarlo o para adquirir un nuevo teléfono móvil.

Otro de los casos más comunes es el de denuncias de robos con intimidación de carteras, dinero a la salida de un cajero y de tarjetas de crédito, según del Ministerio de Interior, la pericia policial no tiene problema alguno en descubrir estos. Debemos de terne en cuenta que las aseguradoras obtienen igualmente información por medio de profesionales e investigadores privados que del mismo modo develan la verdad y que por supuesto siempre se van a pedir responsabilidades al que haya intentado estafar al seguro.